PRIMERA (DE TRES) RAZÓN INDISPENSABLE PARA REDUCIR LA HUELLA DE CARBONO DE NUESTROS LOCALES Y OFICINAS (I)

Tal vez, no nos hallamos planteado seriamente la huella de carbono de nuestros negocios, pero existen muchas razones para reducirla: ahorro de dinero, impacto ambiental y sostenibilidad social.

Más que nunca, es el momento en que las empresas debemos buscar oportunidades creativas para ser más autosuficientes, cosechando beneficios en la reducción de costos, el respeto al medio ambiente y, la mayor satisfacción de las personas. Sin alguno de estos tres factores, una empresa no puede lograr una cultura verdaderamente sostenible.

El término «huella de carbono» se refiere a la cantidad de emisiones de dióxido de carbono y metano de cierta población, sistema o actividad.

La huella de carbono de un local no solo se evidencia en la construcción del edificio, sino en los hábitos de las personas que trabajamos allí.

¿Por qué reducir nuestra huella de carbono?

reducir la huella de carbono en oficina

Ahorro de gastos: cuando reducimos el consumo de energía, ahorramos dinero.

  • Estas deben ser una “norma estrella” porque no nos cuesta dinero, ni tiempo, y se puede realizar de manera inmediata, levantarnos de nuestra silla, y apretar un botón y… ¡Magia! Ahorro económico y mejora del medio ambiente todo en uno.
    • Los pequeños cambios en la calefacción o en la refrigeración: la diferencia de 1º menos en invierno o más en verano, nos proporciona grandes ahorros, tanto como una reducción del 10% en el uso de la energía.
    • Apagar cualquier equipo que no esté en uso en ciertos periodos.
    • Minimizar la iluminación artificial e implementar más luz natural, como tragaluces, paredes interiores de cristal, etc.
    • Instalar luces activadas por movimiento en el interior para asegurarnos que solo están encendidas el tiempo necesario de uso real. 
  • Otras medidas pueden suponernos un gasto inicial, que podremos recuperar en poco tiempo y que nos beneficiará durante muchos años.
    • Reemplazar las bombillas por otras de bajo consumo
    • Actualizar los equipos obsoletos electrónicos o los electrodomésticos, por modelos energéticamente eficientes.
    • La instalación de paneles solares que reduzcan la factura eléctrica.
  • A la hora de emprender una reforma, o una reorganización de sus locales, debemos plantearnos delante de un plano las zonas más lógicas para poder ser eficientes. No se trata de realizar un estudio del feng shui (que si se desea…) sino de racionalizar la energía. Por ejemplo:
    • Un equipo de calor cerca de los conductos de ventilación es un desastre, ya que forzamos a los equipos a trabajar más fuerte y continuamente.
    • Enfriar o calentar una zona de almacén o de archivo como el resto de la oficina supone un gasto de energía extraordinaria.
    • El aire acondicionado junto a una puerta a la calle de apertura automática, es un agujero para la atmósfera y para nuestra cartera.
    • Las plantas o zona de jardín junto a calefacción o salidas de aire son perjudicial para la vegetación y para nuestro bolsillo.
  • Ser eficiente energéticamente aumenta la valía de nuestra propiedad, y en caso de que decidamos vender o alquilar la posesión será un gran valor añadido y que puede marcar la diferencia.
  • Diferentes empresas internacionales han desarrollado un protocolo para la evaluación medio ambiental denominada Certificación LEED® sobre el liderazgo en energía y diseño ambiental.
    Obtenerla supone un aumento en el valor de mercado de cualquier propiedad. Este Certificado se caracteriza por proporcionar una evaluación de la sostenibilidad de las edificaciones valorando su impacto en estas áreas principales:
    • Emplazamiento sostenible
    • Eficiencia en el uso del agua
    • Eficiencia energética, energías renovables y emisores a la atmosfera.
    • Materiales y recursos naturales
    • Calidad del ambiente interior
    • Innovación en el diseño
    • Prioridad regional

En este ahorro de costes es imprescindible la concienciación de todos y cada uno de los elementos humanos que componen nuestro negocio, tanto personal propio como externo, aunque de especial importancia:

  • El jefe o encargado de compras, buscando y verificando productos más ecológicos, reduciendo el número de envíos y de entregas: menos plástico, cartón, combustible, etc.
  • La empresa de limpieza, productos más naturales y biodegradables, eficiencia energética en los aparatos eléctricos, concienciación con el reciclado de todos los empleados de limpieza, ahorro de agua y energía, …

En los siguientes artículos, analizaremos las siguientes razones que nos harán que nuestra huella en el medio ambiente sea más positiva y consciente, a través del impacto medio ambiental y la sostenibilidad social.