Características de los revestimientos de suelos y su seguridad

Suelos seguros. Características de los revestimientos de suelos y su seguridad

La importancia de las características técnicas de los suelos es importantísima a la hora de su limpieza, sus prestaciones y, sobre todo, de su seguridad para los usuarios, como hablamos en nuestra entrada anterior.

El Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, ha elaborado y actualizado una Normativa (NTP434) donde se informa sobre las superficies de trabajo seguras, indica las características del suelo y la forma de mejorar sus prestaciones.

De forma resumida, los diferentes tipos de suelos y su mejor mantenimiento son:

Suelos de hormigón:

• Fácil instalación y de alta resistencia a la compresión (800 kg/cm2)
• Adecuado para locales de tráfico normal y no sometidos a la corrosión.
• Poco poder antideslizante y resistencia medía a la abrasión, produce resquebrajamientos, fisuras o polvo.
• Para mejorar su poder antideslizante se le puede dar un acabado rugoso a tiras.
• En que los suelos de hormigón deban soportar mucho tráfico o estar expuestos a riesgos de corrosión se deberá proceder a mejorarlos bien empleando cementos especiales a base de fusión de cementos aluminados
• Son resistentes a los ácidos, aceites o grasas, bien incorporando endurecedores (resinas sintéticas o conglomerados como son el cuarzo, granito, basalto, carburo de silicio, etc.) o aplicando revestimientos superficiales como son el polvo de asfalto, resinas sintéticas, etc.

Suelos cerámicos:

• Tienen la ventaja de que son fáciles de limpiar, resistentes a la corrosión por ácidos o bases siempre que las juntas se hagan con la ayuda de cemento anticorrosivo, poliésteres, resinas de tipo fenólico, etc.
• También son resistentes a los esfuerzos de compresión, tracción y a los golpes.
• Su relativo poco poder antideslizante, se puede reforzar con diseños que le den cierto relieve.
• Las juntas suelen acumular suciedad sí no se limpian con frecuencia.

Suelos metálicos:

• Se pueden instalar mediante placas fijas, ancladas o enrejados:
  • Las placas fijas son adecuadas para pasillos de circulación.
  • Las placas ancladas pueden ser estriadas o gofradas y son muy resistentes. Su inconveniente es el poco poder antideslizante, que se puede aumentar mediante un revestimiento a base de un argamasado metálico de partículas de fundición acerada que le impide ensuciarse de grasas. Otra posibilidad es enlucir, estañar o recubrir con cintas antideslizantes.
  • Los enrejados tienen como ventaja principal el que no retienen los líquidos o desechos de pequeña dimensión, aunque son relativamente poco antideslizantes. El inconveniente principal es que no soportan grandes cargas por lo que deben estar reservados para pasillos de personal. • Suelos de asfalto: o Adecuados para los talleres de fabricación ligera o almacenes, o Resistencia a la rotura es baja (200 kg/cm2) y alta al desgaste o Son antideslizantes excepto en ambientes con grasa o No producen polvo y son económicos.

Suelos de pizarra:

• Estéticos pero muy caros
• Resistentes a los ácidos
• Suelos de linóleum: o Tiene una gran resistencia y es adecuado para locales con poco tráfico, si está bien colocado.

La utilización de revestimientos de suelos se realiza con productos:

• Base de látex, cera, caucho clorado, resinas sintéticas o pinturas diversas.
• Cera en pasta o en emulsión se utiliza para preparar las superficies de los suelos.
• Resinas sintéticas para obtener el grado antideslizante necesario de los suelos.
• Productos a base de pinturas son productos de acabado semipermanente principalmente en suelos de madera.
• Los revestimientos antideslizantes para superficies permanentemente mojadas mejoran la situación y garantizan durante un periodo sus propiedades. Recomendados para piscinas, vestuarios-duchas, cocinas, etc.
• Para superficies resbaladizas por desprendimiento de materiales grasientos, por ejemplo, en cocinas, es preferible utilizar una plataforma antideslizante sobre la que circular sin peligro.

Por supuesto cada tipo de suelo necesita unos productos determinados, tanto para la limpieza específica como en los acabados y en los selladores. También necesitamos conocer los productos o sustancias prohibidos.